El Orégano (Origanum vulgare) es una planta herbácea perenne aromática que habita las colinas y montañas de la cuenca mediterránea, extendiéndose por toda Europa y Asia central. Su uso remonta a los tiempos de los egipcios que lo empleaban como especia y conservante de los alimentos. Hoy en día sabemos que representa uno de los antibióticos naturales más potentes y efectivos conocidos por el hombre.
Entre sus principios activos destacan dos compuestos monoterpénicos, carvacrol y timol, que actúan de forma sinérgica dando lugar a su extraordinario carácter antimicrobiano. La actuación del carvacrol y timol frente a un amplio rango de agentes patógenos, parece ser debida a la capacidad de inhabilitar los mecanismos celulares que producen energía (ATP) y, al mismo tiempo, determina cambios en la composición de la membrana que desestabilizan su permeabilidad induciendo la ruptura y muerte celular. No obstante, estos principios activos no son los únicos que determinan el efecto antimicrobiano del Orégano, siendo su aceite esencial una compleja mezcla de sustancias que influyen sinérgicamente convirtiéndole en un valioso recurso natural contra las infecciones.
Con respecto al metabolismo de los compuestos principales del aceite esencial de Orégano se sabe que es rápido y en poco mas de un día se excretan completamente a través de la orina. Una parte significativa se elimina de forma casi intacta, permitiendo que actúen como antisépticos en el tracto urinario.
En definitiva las propiedades a destacar de esta planta medicinal son:
- ANTIBACTERIANA: ayuda a frenar la propagación de las infecciones ya que obliga a las bacterias a entrar en un estado forzado de reposo bloqueando su crecimiento y producción de toxinas. Este efecto bacteriostático es complementado por el efecto bactericida observado en varios patógenos, en los cuales carvacrol y timol desestabilizan el equilibrio de sus membranas llegando a expulsar unos compuestos denominados lipopolisacáridos (LPS), lo cual provoca el daño irreparable de la bacteria.
- ANTIMICÓTICA: efectivo contra una gran variedad de hongos oportunistas, el Orégano es un valioso aliado para combatir la Candidiasis intestinal y vaginal. Incluso a bajas concentraciones su aceite esencial inhibe el crecimiento de las hifas siendo, el desarrollo de estos filamentos, considerado como uno de los cambios que determinan el carácter invasivo de los hongos del género Candida.
- ANTIVIRAL: en medicina popular se ha hecho un amplio uso de esta planta para combatir gripes y resfriados. Su eficacia se ha demostrado con experimentos in vitro frente al virus de la influenza A2, el vaccinia virus asociado con la viruela y el herpes simplex del tipo 2 (HSV-2).
- ANTIPARASITARIA: algunos protozoos como Giardia lamblia y otros parásitos intestinales se adhieren al epitelio intestinal causando diarrea, dolores abdominales o mala absorción de los nutrientes. El aporte de aceite esencial de Orégano en la dieta puede favorecer su erradicación hasta en un 77% de los casos y reducirla significativamente en el restante 23%.
- DIGESTIVA: es útil en caso de atonía de los órganos internos gracias a su efecto digestivo y carminativo que estimula el estómago y las secreciones de los jugos gastrointestinales. Se trata pues de un válido remedio en caso inapetencia, digestión laboriosa, gases, estreñimiento o diarrea.
- EXPECTORANTE Y SUDORÍFICA: se emplea antes la aparición de dolencias respiratorias causadas por procesos infecciosos (catarros, resfriado, bronquitis, tos o anginas) porque ayuda a desinflamar los bronquios y a reducir la fiebre.
- ANTIOXIDANTE: los polifenoles como el ácido rosmarínico son sustancias que manifiestan una acción protectora contra al daño oxidativo. Además de absorberse fácilmente en el tracto intestinal, el organismo los utiliza para prevenir la oxidación lipídica asociada a procesos inflamatorios, enfermedades crónicas y envejecimiento.
Todas las propiedades medicinales indicadas del Orégano demuestran que se trata de una planta que puede abarcar una amplia banda terapéutica. Sin embargo, la mayor dificultad encontrada hasta ahora para su uso medicinal ha sido la elevada irritación que provoca su aceite esencial al ingerirse. Para evitarlo existen algunas soluciones que pueden ser adoptadas durante la elaboración del producto, como es el caso de la tecnología de microdispersión. Este proceso de mezclado del extracto seco con el aceite esencial de Orégano genera pequeñas esferas que mejoran la absorción y la tolerabilidad del producto, además de conservar todos los principios activos presentes en esta planta.