La Comisión E ha aprobado el uso en los siguientes casos:
Las yemas de pino y el aceite esencial de las hojas de pino: en afecciones catarrales de las vías respiratorias altas y, de forma tópica, en dolores musculares y neuralgias.
El aceite esencial de trementina purificado se utiliza interna y externamente para el tratamiento de afecciones bronquiales crónicas con abundante mucosidad. De forma externa también se utiliza para afecciones reumáticas y neuralgias.
Existe evidencia científica suficiente para recomendar el picnogenol en patologías como: insuficiencia venosa crónica, calambres musculares, varices microangiopatías diabéticas, antioxidante, disfunción eréctil e infertilidad masculina, hipercolesterolemia, osteoartritis, síndrome de déficit de atención/hiperactividad en niños.