La EMA aprueba el uso de la flor y del aceite esencial para aliviar síntomas de estrés mental y agotamiento y como ayuda para conciliar el sueño.
La ESCOP aprueba su uso para el tratamiento de la inquietud, agitación e insomnio. A demás, también indica su utilidad en casos de molestias abdominales.
Algunos estudios científicos han mostrado la utilidad del aceite de lavanda en el tratamiento de los síntomas de la menopausia tales como sofocos y dismenorrea.